La Federación Mundial de Sordos, lanzó por primera vez el Día Internacional de Sordos en 1958, el "día" se extendió más tarde a la Semana Internacional de los Sordos. Se celebra anualmente durante la última semana completa de septiembre. La semana culminará con el Día Internacional de los Sordos en el último domingo de la semana.
El 1er Congreso Mundial de la Federación Mundial de Sordo, se llevó a cabo en septiembre de 1951, y la elección de septiembre para celebrar la Semana Internacional y Día de Personas Sordas es una conmemoración de este acontecimiento histórico.
El propósito de esta celebración es llamar la atención del público en general a los logros de las personas sordas y las preocupaciones de la comunidad sorda. Durante esta semana, las organizaciones de personas sordas en todo el mundo se les anima a llevar a cabo campañas de información sobre su trabajo, y dar a conocer sus demandas y peticiones. Esta semana también aumenta la solidaridad entre las personas sordas y sus partidarios, y se utiliza como una oportunidad para estimular un mayor esfuerzo para promover los derechos de las personas sordas en todo el mundo.
Tras la lectura de un manifiesto, se celebrarán talleres y exposiciones de sensibilización sobre la comunidad sorda y la lengua de signos.
La contaminación acústica es una de las mayores agresiones para la salud de los oídos en la sociedad. Este habitual exceso de ruido, daña las funciones auditivas y puede provocar hipocausia (pérdida en la calidad o recepción del sonido)
Cada 26 de Setiembre se celebra el Día Mundial de la Sordera, una cita donde se recuerda que la Organización Mundial de la Salud aconseja que la exposición al ruido no supere los 65 decibelios. Fuera del ámbito laboral, los sonidos del tráfico y las obras, los locales con música muy alta, el mal uso de los equipos musicales con auriculares, son algunas de las otras causas de la pérdida auditiva que ha dejado de estar asociada a las personas mayores.