Cómo diferenciar el resfriado de la gripe. Consejos y tratamientos

Alguna vez en nuestra vida nos hemos preguntado si estábamos padeciendo un resfriado o una gripe. En innumerables ocasiones hemos confundido los síntomas y realizado mal el tratamiento.
Resfriado o catarro es una inflamación de las vías respiratorias que se produce como resultado de una infección viral. Puede durar varios días (3 o 4 días) y ser causado por más de 200 virus diferentes.
Los síntomas del resfriado son:
- intensa congestión y secreción nasal acompañada de dificultad para respirar por la nariz, estornudos, goteo nasal, tos y dolor de garganta
- dolor de cabeza, malestar general y ronquera
Gripe es una infección de tipo vírica causada por el virus de la influenza, tanto tipo A (invierno y comienzos de primavera) como tipo B (en cualquier época del año).
Los síntomas de la gripe son:
- duración de una semana o más
- existencia de fiebre
- es altamente contagiosa
- ocasiona dolor de cabeza y de garganta, así como dolor muscular y de las articulaciones
Así pues, tanto la gripe como el resfriado común son enfermedades infecciosas causadas por virus. Ninguna de las dos responde al tratamiento con antibióticos y aunque los síntomas puedan ser similares son enfermedades diferentes que requieren tratamiento específico en cada caso.
Como se puede comprobar en los síntomas expuestos anteriormente, las principales diferencias son:
- el periodo de incubación y la duración
- fiebre alta en la gripe y casi inexistente durante el resfriado
- dolor de garganta frecuente en el resfriado y ocasionalmente en la gripe
- dolor muscular casi exclusivamente en la gripe
- secreción nasal y tos aparecen en la gripe sólo si se complica
- la gripe posee vacuna, el resfriado común no
Consejos:
- protegerse del frío y de los cambios bruscos de temperatura. El frío aumenta la vulnerabilidad del cuerpo ante las infecciones virales
- durante un resfriado común beber mucho agua
- realizar lavados de nariz con suero fisiológico para mantener las fosas nasales limpias, respirar mejor y evitar las complicaciones
- antes de dormir tomar vahos de vapor de agua con aceite esencial de eucalipto para descongestionar
- evitar el tabaco
- reducir el consumo de proteínas de origen animal: leche, queso y carne, para no fatigar al organismo con alimentos de difícil digestión
- los medicamentos anticatarrales pueden producir somnolencia y disminución de la capacidad de concentración
- evitar tocarse la nariz y llevarse la mano luego a la boca
- estornudar sobre un pañuelo para evitar contagios
- dormir con la cabeza elevada en la almohada para aliviar la congestión nasal
- vacunarse contra la gripe en el mes de noviembre tras consultar con el médico
- nunca utilice antibióticos sin receta de su médico, no tienen acción contra los virus
Es recomendable visitar a su médico siempre que existan complicaciones.