Cuando hablamos de relaciones saludables nos referimos a aquellas relaciones que se dan en la familia o pequeños grupos que posibilitan que sus integrantes se sientan bien entre sí. Para ello es importante que los miembros de la familia y/o del grupo puedan expresar libremente sus ideas y opiniones, propiciando el desarrollo de sus capacidades emocionales para enfrentar la vida y/o situación que los aúne.
Una familia donde existen relaciones saludables presenta las siguientes características:
- Los miembros se sienten muy unidos los unos a los otros.
- Se piden ayuda entre sí.
- Les gusta pasar juntos el tiempo libre.
- Les es fácil encontrar momentos para hacer cosas juntos
- Promueven la participación de todos.
- Son aceptadas las sugerencias de cada uno de los miembros.
- Se muestran afecto y pueden expresar libremente sus emociones
Las relaciones saludables se pueden generar incentivando:
+ Un clima de confianza y de libertad
+ La amistad entre todos los miembros
+ Propician el dialogo entre sus integrantes como forma de resolver las desavenencias.
+ Enseñándonos entre todos y con el ejemplo a ser responsables de sus actos.
+ Creando oportunidades de conversación, para escucharnos y poder comprendernos.
+ Brindando y expresando amor, propiciando el desarrollo de la afectividad entre los miembros
+ Fomentando en el espacio donde nos encontremos, una atmósfera positiva en la que se practiquen valores como: la tolerancia, el respeto, la solidaridad, etc… A fin de obtener buenas relaciones personales debemos tener la actitud positiva que se refleja en los siguientes procedimientos para controlar las frustraciones de la vida.